miércoles, 4 de agosto de 2010

Amuertoria.

Incomprendido por todo un rio,
un alma mas en pena ambulando,
en vida, que muerte desafío,
cantando ronco y llorando.

El fuego purifica almas,
el hielo las destroza,
en malas manos son armas,
como espinas en la rosa.

Quien es el anima que flota,
otra que mato el despecho,
la ira que ahora ya no importa,
y ahora se tiro en su lecho.

El arte de sobrevivir,
tanto llanto por una paga,
por creer poder servir,
llorar al morir por su daga.

El tiempo da conocimientos,
por propia vida me di cuenta,
se sentir esos momentos,
como si estubiera en venta.

Uno mas entre dramaturgo,
malintrepretando las señales,
que el amor me aleje de su yugo,
esperare olvidar con los añales.

Evadir lo que dice la vida,
pensar por y para mi mismo,
encontrar la puerta de salida,
y sobrevivir al fuerte cataclismo.

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